jueves, 26 de febrero de 2015

QUE NO TE MIENTAN, por MARTA IBAÑEZ DE ALDECOA

La gente tiende a mentir, desde siempre. Nunca he conocido a nadie que no lo hiciese; aunque fuesen mentirijillas, son piadosas dicen…

Pero a las emociones no se les puede mentir, o es por lo menos es muy difícil engañar al cuerpo y en especial a la cara. La cara de una persona es el espejo del alma ¿no?

Las emociones pueden ser de manera consciente o inconsciente. En el segundo caso, las que se manifiestan de manera inconsciente son las microexpresionesLas microexpresiones tienen una duración muy corta y tienes que ser muy hábil para verlo.  Hay microexpresiones que son obvias porque no tienes el control sobre ellas, por ejemplo no tienes control de ponerte rojo cuando te da vergüenza algo o muchas veces no tienes el control de tu cuerpo en una situación de peligro.

A la hora de ver si alguien te miente el componente verbal hace que rápidamente la persona diga algo más políticamente correcto y sea más fácil ocultar la emoción.

Aún así, hay 7 microexpresiones que a no ser que seas actor o un experto que domine el lenguaje no verbal, son imposibles de ocultar.
Emociones; Tristeza; lenguaje no verbal

La tristeza es difícil de ocultar, se caracteriza porque arqueamos las cejas, los labios los ponemos con forma de u invertida, tenemos tensión en el mentón, nos salen arrugas en el entrecejo y el parpadeo del párpado superior es mucho más lento. 

Emociones; Rabia; lenguaje no verbal
La rabia se caracteriza porque las cejas se ponen en forma de m, hay tensión en los párpados, hay tensión en la parte central de la nariz y los labios se tensan, de manera que cuando la rabia nos llena nos entran ganas de gritar, el grito es el primer indicio de la rabia. Generalmente la rabia, en una situación normal, lo notarías porque una persona frunce el labio.
Emociones; Sorpresa; Lenguaje no verbal

La sorpresa se ve rápidamente porque las cejas se ponen en forma de M, los ojos se ponen como platos y la boca normalmente esta abierta y relajada.


Emociones; Desprecio; Lenguaje no verbal

El desprecio también se puede observar porque la nariz “se sube”, es como si hubiese olido algo que huele mal. Y por supuesto el labio también se eleva sólo de un lado. Hay veces que parece una sonrisa, pero no lo es, suelen ser sonrisas asimétricas y son parciales.  

Emociones; Asco; Lenguaje no verbal


El asco se caracteriza porque la nariz de alguna manera se arruga y el labio superior se levanta y se fruncen.
Emociones; Alegría; Lenguaje no verbal
La alegría es difícil de disimular, pero es posible. Si has contado un chiste y ves que la otra persona no tiene las mejillas levantadas, no tiene arrugas a los lados de los ojos (sí, las famosas “patas de gallo”) y  los ojos no se hacen más pequeños entonces tu chiste no habrá tenido ninguna gracia.

Emociones; Miedo; Lenguaje no verbal

En el miedo, a diferencia de la sorpresa, los labios están separados pero tensionados, las cejas están también en tensión y los párpados superiores elevados y los inferiores tensos. Cuando tenemos miedo agudizamos todos nuestros sentidos y por eso los párpados se agudizan para que la vista esté al 100%.


Estas son las 7 emociones básicas. No se pueden ocultar así que la próxima vez que te presenten a alguien, fíjate en esos segundos iniciales en su rostro,... quizá te lleves alguna sorpresa.

lunes, 23 de febrero de 2015

SNAKE OIL, por CARLOS GONZÁLEZ GÓMEZ

En el salvaje oeste, allá por el siglo XVIII se popularizó la venta de pociones de efectos cuasi mágicos, denominadas Snake Oil.

Las propiedades atribuidas al Snake Oil eran incontables. Era la piedra filosofal de la salud.
Fórmulas mágicas para la salud, recetas alquímicas para conseguir metales nobles a partir de materiales innobles, dietas milagrosas para adelgazar en un mes, aprender idiomas en 1.000 palabras, manuales para aprender a liderar… En definitiva, fórmulas mágicas para conseguir el éxito se repiten a lo largo de la historia. 

Siempre hay quien quiere ganar un buen dinero vendiéndolas y siempre hay algún ingenuo que las compra. Adivino que hay un buen pellizco del PIB moviéndose por estos derroteros. Así que si me permitís intentaré hacer fortuna haciéndome eco de mi receta mágica para el éxito: El trabajo duro.

Bueno, en realidad no es mía la receta. La he descubierto, como una aparición en un programa de radio.

Hoy, como acostumbro, iba al trabajo escuchando una emisora de radio que emite en Inglés. En un momento del programa, el presentador del mismo, hizo un elogio al trabajo duro mediante una cita que rezaba lo siguiente: early to bed and early to rise makes a man healthy, wealthy and wise.

A continuación bromeó con su operador de radio, indicándole públicamente que él cumplía con las primeras premisas del adagio: se acostaba temprano para poder madrugar y tener la emisora abierta a las 06:00 a.m. e incluso gozaba de salud y sabiduría, aunque no de una buena situación de riqueza económica, ya que trabajando por cuenta ajena es difícil esperar que uno se haga rico.

Creo que en el mismo momento en que terminó la broma, el presentador que además era el jefe del operador y dueño de la emisora, se debió dar cuenta de que quizás a su empleado no le había resultado demasiado gracioso la mención a su estado financiero e hizo un hábil requiebro, para quitarle hierro al asunto.

Mencionó a Amancio Ortega y recordó que éste había trabajado más de veinte años por cuenta ajena, antes de convertirse en fundador de "su conocido grupo empresarial", y posterior 4ª fortuna del mundo. Añadió que sin duda esos veinte años trabajando para otros, aprendiendo los secretos de la profesión, madrugando todas las mañanas para ir al tajo, y el posterior trabajo duro de crear una empresa y hacerla progresar, habían sido las claves del éxito de Amancio.

Para terminar de arreglar la broma lanzada en el aire sobre su subordinado, el presentador anunció el break antes de las señales horarias de las 08:00 am, lanzando un reconocimiento público al operador de radio, mencionado que dicha radio era el bebé engendrado por el mismo  operador – It´s your babe - dijo. Y añadió: quien sabe si pasados unos años, no te convertirás en un segundo Amancio.

Apartando la anécdota sobre cómo gestionar la comunicación entre jefe y empleado cuando estás hablando en directo por la radio a miles de radio oyentes, ciertamente puedo compartir la personal visión de este presentador de radio y también empresario, sobre el origen del éxito de Amancio Ortega.

La mayoría podríamos estar de acuerdo en que el caso de Amancio es paradigmático, y excepcional, pero que los secretos de su éxito podrían estar al alcance de cualquiera.

Consideramos los siguientes factores de una ecuación de éxito:
  • Trabajo. 
  • Inteligencia.
  • Conocimiento.
  • Dirección.
  • Suerte.

Ahora juntémoslos, en la proporción necesaria. Debidamente ponderados y ordenados.
Trabajo duro y metódico, guiado por una buena inteligencia. No se trata de trabajar “a lo me cagoen”, sino de trabajar eficientemente y de manera planificada para conseguir objetivos.
A lo largo del tiempo, ese trabajo irá dando como fruto un profundo conocimiento de lo que se hace, del sector en el que se opera, entendiendo como son las interrelaciones de los operadores de dicho mercado. Provocará un conocimiento especializado

Si aunamos a ese conocimiento especializado una cierta inteligencia que nos permita captar los huecos del mercado, las necesidades insatisfechas y como satisfacerlas de la mejor manera posible (dejándonos un sustancioso beneficio) y lo aderezamos con un poco de suerte, que siempre cuenta en la vida, podríamos tener Éxito.

Esta ecuación, que podríamos considerar de éxito individual, deberíamos elevarla a una ecuación más amplia. Podríamos hablar de inteligencia colectiva y de éxito grupal.

Cuando una organización es capaz de diseñar bien el trabajo a realizar para que cada miembro del equipo no solo trabaje duro, sino bien; eliminando todas aquellas tareas que no generan valor para el cliente, y éste no está dispuesto a pagarlas; y aquellas tareas que dan como fruto una satisfacción del cliente se hacen con cariño, desde el rigor y con el compromiso por el trabajo bien hecho, se va por el buen camino.

Cuando una organización es capaz de conseguir que cada uno de los miembros de su equipo se conviertan en auténticos especialistas de lo que hacen, sin perder de vista la perspectiva general y el horizonte al que llegar, se va por el buen camino.

Cuando una organización es capaz de conseguir incorporar el conocimiento colectivo para resolver los problemas, yo creo que se va por el camino. 

Y si a esa organización le acompaña un poco la suerte, pues ya tenemos el éxito asegurado.

Podríamos concluir que el trabajo duro acompañado de las dosis adecuadas de inteligencia y suerte nos llevarán al éxito y  el éxito conduce a la felicidad. Pero como ya apuntó hace unos miles de años un tal Aristóteles, la felicidad no está en la riqueza, ni en el éxito tal y como lo entendemos hoy en día. La felicidad está en la vida virtuosa. Así que acostaros pronto, madrugad, y gozaréis de salud, riqueza y sabiduría. Lo que os ayudará a ser moderadamente felices.

jueves, 19 de febrero de 2015

UNA NUEVA ERA PARA LOS RECURSOS HUMANOS, por BEATRIZ OVEJERO

“La transformación de los RRHH, el impacto de las nuevas tecnologías y el compromiso de los empleados en un entorno de continuos cambios…van a ser claves en aquellas empresas que quieran ser competitivas”.

Así comienza un artículo que leí el pasado 4 de febrero en www.expansion.com, “La visión de 20 Directores de RRHH”. Personalmente, no puedo estar más de acuerdo.
Está claro que vivimos un momento de grandes cambios, se avecina, o eso esperamos todos, una fase de crecimiento económico, una progresiva salida de esta crisis que ha hecho perder la esperanza y la perspectiva a tantas personas. 

Se habla mucho de las nuevas tendencias en la Gestión de Recursos Humanos; el Big Data, se consolida como una potente herramienta para poder predecir hechos futuros, contando con un incalculable número de datos. El empleado 3.0, una  nueva visión de las personas, más global, más flexible, más disponible en el tiempo y en el espacio, que maneja las redes sociales y está en red dentro y fuera del trabajo.

Está muy bien, y es el futuro, pero ¿Podemos hacer cosas más sencillas primero? ¿Se puede pensar en una estrategia de Recursos Humanos que trate de conseguir la excelencia y la sostenibilidad?

Ahora, más que nunca, considero que los directores de Recursos Humanos, y los que nos estamos formando en esta función para llegar a ser profesionales en este área de la empresa, tenemos la oportunidad y la responsabilidad, de intentar gestionar ese cambio de manera coherente y responsable. No se puede crecer de cualquier manera, no se puede salir de la crisis creando puestos de trabajo precarios, aprovechándonos de la necesidad de empleo que hay en estos momentos, que solo traerá a nuestra empresa personal desmotivado.

Es el momento de desarrollar el talento dentro de la empresa, de reconocer el esfuerzo de nuestros trabajadores, ¿existe un refuerzo mayor, y con menor coste, que hacer saber a un colaborador el beneficio que aporta a la organización con su excelente trabajo? 
Es el momento de establecer un sistema retributivo justo y equitativo, para que los trabajadores se sientan valorados y sean capaces de pensar, de crear, de mejorar, de aportar ideas, en vez de focalizar sus pensamientos en su insuficiente salario o en sus malas condiciones laborales.

Afortunadamente, en los últimos meses, he tenido oportunidad de conocer empresas que sí hacen lo que dicen, que realmente creen, que el valor de una empresa reside en las personas que la integran, y que su motivación es el motor para conseguir grandes cosas.

Creo que hay mucho trabajo por hacer, pero si de verdad queremos conseguir un cambio, y queremos empresas competitivas, tenemos que ser líderes de ese cambio, y abrir la mente a una nueva era en la que los Recursos Humanos van a ser un factor de éxito…ahora más que nunca.

jueves, 12 de febrero de 2015

EL SENTIDO COMUN, por ELENA CONDE RODRIGUEZ

No se vosotros, pero yo llevo toda la vida oyendo hablar del sentido común y nunca me había dado tanto que pensar como ahora. Y es que últimamente no hago más que oír hablar del sentido común: a casi todos los profesores del Master de RRHH que estoy cursando, a los políticos, en la televisión, en la calle, a mi familia…

Os pongo unos ejemplos que últimamente me han llamado la atención por la repercusión mediática que tienen:


Hace nada, y coincidiendo con los atentados que tristemente han tenido lugar en Francia, nuestro presidente del gobierno hizo unas declaraciones en las que decía que “….la lucha contra el terrorismo es de puro sentido común".





En el último spot de una de las primeras marcas de leche de España, titulado “Con los pies en la tierra”, también hace referencia al sentido común: “….en esta empresa estamos buscando a gente con los pies en la tierra, como tú y como yo, ¿veis estos pastos tan verdes? aquí estamos sembrando vuestro sentido común…”




Como se veis, en estos ejemplos se habla del sentido común por motivos muy diferentes, y es que se podría decir que contando con el sentido común la raza humana pasamos de tener cinco sentidos a tener seis, ya que este “sexto sentido” funciona igual que los demás, de forma  innata. 

Pero si esto realmente es así, y en relación a los ejemplos expuestos anteriormente, se me plantean preguntas a las que no tengo respuesta: si todos tenemos sentido común de forma innata, porque es tan difícil llegar a un acuerdo para la lucha conjunta contra el terrorismo, o porque no todo el mundo toma esa marca de leche si es la mejor para nuestra salud.……….???

Para poder dar una respuesta a estas preguntas, busco la definición de sentido común
“El sentido común son los conocimientos y creencias compartidos por una comunidad y considerados como prudentes, lógicos y válidos. Se trata de la capacidad natural de juzgar los acontecimientos y eventos de forma razonable”. 

Teniendo en cuenta esta definición, estoy casi segura de que si un grupo de personas debate sobre la misma, va a haber muchas interpretaciones diferentes, ya que existen diferentes tipos de comunidades y cada una tiene establecidos una serie de valores en función de sus necesidades, es decir, que cada cual solemos dar más importancia a lo que nos afecta en nuestro día a día, y eso también lo hacemos de forma” innata”.

Y es que mucho me temo, que el sentido común se ve altamente influenciado por nuestra forma de ser, por nuestros intereses, por nuestros miedos, por nuestras necesidades, por nuestras creencias,…. (al igual que cerramos los ojos cuando no queremos ver algo que no nos gusta o que nos asusta, o evitamos tocar cosas que nos resulta desagradables, o somos incapaces de hablar en ciertas situaciones) porque si no es así, pasan demasiadas cosas imposibles de explicar si se presupone que todo el mundo utiliza el sentido común a la hora de obrar.

Teniendo en cuenta todo esto, creo que una de las armas con las que podemos dotar a nuestro sentido común para que pueda luchar por mantenerse intacto es la empatía; estoy casi segura de que si tuviéramos ganas, tiempo, o simplemente el “pálpito” de que, solo con intentar ponernos en el lugar de los demás por un segundo, dejando de lado nuestro beneficio más inmediato, en muchas ocasiones todos obraríamos en consecuencia, las cosas serían mucho más fáciles y de alguna manera todos viviríamos con más armonía.

Os invito por tanto a que intentemos poner un poco de empatía en esta vida loca que nos ha tocado vivir, y nos permitamos el lujo de poder dedicar unos minutos de reflexión diarios para poder así recrearnos en “nuestro sentido común”, olvidándonos por un momento de qué y de quién somos, y de que podemos cambiar de nuestras vidas para mejorarlas.

Recordar que solo tenemos una vida y tenemos la obligación de vivirla y disfrutarla lo mejor que nos sea posible, y de compartirla con nuestro entorno más cercano y a veces no tan cercano.

¡¡¡Buen provecho a todos!!!

jueves, 5 de febrero de 2015

NO SOLO PARECERLO, SINO SERLO, por RAFAEL ACEVES

Me lo creo. Suelo ser bastante desconfiado en otras ocasiones y a menudo escéptico. Dudo de la buena voluntad de las empresas cada vez que en los maratones solidarios televisivos aportan una cantidad económica diciendo nombres y apellidos (alabo el gesto, por supuesto). O en otros actos con difusión mediática similar o ad hoc.

Sin embargo, en estos casos, me lo creo.

Son 3 ejemplos donde la RSE/RSC de la entidad ha surgido per se. Sin buscarlo.

Su conocimiento público se ha mostrado, manifestándose el verdadero corazón de la empresa. Sus valores.

  • Ejemplo 1.

A partir de un encuentro casual entre un “blogger” y un niño.

El bloguero se dedica cada día a hacer una foto a una persona que encuentra por la calle y preguntarle alguna cosa sobre su vida. Le pregunta al niño ¿quién es la persona más importante en tu vida?. El niño responde que su profesora y le razona el porqué. Todo lo que cuenta es tan interesante que el bloguero busca a la profesora para conocerla. La promoción inesperada de este bloguero les ha reportado poder abrir nuevas vías de financiación. 
Puedes leerlo en: ¿Cómo un encuentro entre dos desconocidos recaudó un millón de dólares? (Click aquí para verlo).   Merece la pena.

El colegio dónde trabaja la profesora ha nacido con unos valores, los ha puesto en práctica y ha encontrado su recompensa de forma casual. Lo que más he valorado es un “pequeño detalle”, siguiendo su filosofía, ahora ofrecen una beca la cual está dedicada al alumno que facilitó toda la historia. Siguen confiando en dar importancia a las personas de su organización.

  • Ejemplo 2.

Primera Parte.
Un club de fútbol colabora en la aportación del dinero necesario para evitar el desahucio de una anciana. (click aquí para leer la noticia completa).

Lo que quiero destacar de esta historia no es la colaboración económica que pueda realizar el club como institución, sino que nos percatemos de quién se implica en ello. Y en este caso se implican el entrenador, los jugadores, los trabajadores del Club, etc. 

El Club está muy enraizado con el barrio, está en su ADN reconocer cómo los habitantes del barrio han apoyado al Club en momentos de dificultades y ahora, desean devolver parte de ello.

Segunda Parte.
La anciana, apoyada por el equipo de fútbol, aporta parte del dinero que le habían dado para que los hijos de un exjugador del club puedan visitar a su padre gravemente enfermo. (Click aquí para leer artículo completo).

Esta segunda acción, implica que se evidencie una vía de actuación donde los valores del Club se muestren nuevamente. La imagen que se transmite es la que se intuía (Club cercano con la gente, apoyo común, esfuerzo continuado, agradecimiento, humildad,…).

  • Ejemplo 3.

En años anteriores, la conocida empresa burgalesa que sufrió un incendio y quedó calcinada el pasado mes de noviembre, nos anunciaban durante las navidades (de forma más o menos sensiblera) el que merecíamos seguir disfrutando de la vida pese a las dificultades económicas y sociales en las que nos encontrábamos.

Este año, lamentablemente, se lo han tenido que aplicar a ellos mismos debido a un inoportuno incendio (casi todos lo son). Y la verdadera cara de la empresa se ha mostrado y sus verdaderos actos demostrado.

No me refiero al anuncio que han creado para estas navidades, en la línea de los anteriores. Un anuncio de los que, como comentaba al principio del post, era de los que me hacían ser escéptico de la transmisión de los valores que posee la empresa o por lo menos nos quiere enseñar. Me refiero a que han asegurado que se reconstruirá la fábrica y se propiciará que regresen todos los trabajadores. Si esto no cambia, es lo que me convence de la verdadera Responsabilidad Social de la empresa, la ética por encima de la estética.